"Yo soy Giulietta. Si vas a hablar de mí, pruébame"
http://www.youtube.com/watch?v=az5E5-rUXy8
Escuchar lo que se dice con los ojos cerrados, y lo que menos te imaginas es que sea un anuncio de un nuevo coche.
La fusión de la presentación de un coche, que se muestra su estreno, con la voz susurrante y cálida de una mujer. Un anuncio donde se intercalan las imágenes del coche como la novedad, y la mujer que pide cosas, que tiene deseos. El juego de la sensualidad, la tentación, la provocación, para llamar la atención: "Mírame, tócame, acaríciame, provócame, sedúceme, contrólame, protégeme, grítame, relájame".
La mujer utilizada como reclamo,
donde se muestra como objeto de atención, con palabras atrayentes. Mito de la
mujer, del ideal de belleza que Simone de Beauvoir comenta en el libro
<<el segundo sexo>>
El lema del anuncio "Yo soy
Giulietta. Si vas a hablar de mí, pruébame”. Por un lado, si vas hablar ¿del
coche o de la mujer? Ahí se hace visible un doble sentido que lleva a dos
interpretaciones. Pruébame, es como la muestra final, pero que otra vez lleva a
la confusión, se muestra un coche, pero habla una mujer, sale una mujer en el
anuncio que es quien pide que la miren, que toquen, que la acaricien, la
provoquen, la seduzcan, la controlen, la protejan, la griten o la relajen; el coche
es masculino, pero sólo se habla en femenino, de ahí la manera de crear la
duda, el deseo, la tentación, de jugar con la seducción…
La mujer como objeto que la
MIREN, que se sienta observada, bella, que atraiga, que la TOQUEN, como muestra
de cariño, que la PROVOQUEN, el juego de la tentación, que la SEDUZCAN,
sentirse deseada, bella, querida, que la CONTROLEN, que el hombre muestre así
su preocupación, que la PROTEJAN, que el hombre sea capaz de cuidarla, que la
GRITEN, a modo de que el demuestre su valor, su hombría, su poder, y que la
RELAJEN, que él sea capaz de darle bienestar. Es como si las palabras fueran un
reclamo, para lo que las mujeres pedimos, queremos o necesitamos.
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